¡Al fin ha rebajado de peso! Pero al llegar a la meta deseada, comienza otra gran lucha quizás más difícil que la anterior: Mantenerlo. Se ha comprobado que cambiar constantemente de dieta es la forma menos segura para llegar al peso ideal, al igual que restringir el consumo de algunos alimentos, ya que de esta manera puede generar deficiencias en su organismo y es más fácil recuperar otra vez esos kilitos que ya había perdido.

La clave es saber disfrutar la vida y elegir opciones sanas para comer lo que se le antoje, por ello tome en cuenta lo siguiente.

• Tome mucha agua: de preferencia servida con mucho hielo y una rodaja de limón. También se puede tomar limonada, café, té y refrescos de dieta, pero con moderación.

• Coma vegetales. Tenga siempre en el refrigerador vegetales listos para comer, como zanahorias, apio, coliflor, etc.

• ¡No se brinque la sopa! Los alimentos líquidos satisfacen más rápido que los sólidos.