El glaucoma es una enfermedad del ojo relacionada con la edad, puede limitar parcial o severamente la visión periférica de una persona, sin dañar la visión central ni la agudeza visual. Esto significa que muchas personas que tienen la enfermedad serían capaces de pasar el único examen de la vista que se exige en este momento para obtener una licencia de conducir, en la mayoría de los países, conocido como la prueba de agudeza visual. Los conductores necesitan una buena visión periférica, con el fin de evaluar y mantenerse con el flujo de tráfico, permanecer en el carril apropiado y detectar semáforos, peatones, vehículos y otros obstáculos.
En este estudio, fueron evaluados dos grupos de 36 personas, cada uno utilizando un simulador de conducción. Las personas en el grupo uno tenían glaucoma avanzado y los del grupo dos tenían visión normal. Los grupos se distribuyeron por edad, experiencia en conducción y otras características. El escenario de accidente más común para ambos grupos de glaucoma y visión normal fue la entrada repentina de un niño, un automóvil u otro objeto en la trayectoria del conductor, por el costado. El grupo de glaucoma, sin embargo, tuvo más del doble de colisiones que el grupo de visión normal.
El glaucoma es la segunda causa de ceguera en el mundo. Si no se trata, el glaucoma reduce la visión periférica y, finalmente, causa ceguera al dañar el nervio óptico.
La Academia Americana de Oftalmología recomienda que todas las personas se hagan un examen completo de la vista, a los 40 años, a fin de poder diagnosticar el glaucoma y otras enfermedades del ojo, relacionadas con la edad y tratarlas a tiempo para minimizar la pérdida de la visión.