Vio todo desde arriba


Cerrar!

Momentos en que era preparado para emprender vuelo Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que era preparado para emprender vuelo Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Vio todo desde arriba

    Su hermano lo ayudará a volar su helicóptero.

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que regresaba a Tocumen.

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que era preparado para emprender vuelo Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Vio todo desde arriba

    Su hermano lo ayudará a volar su helicóptero.

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que regresaba a Tocumen.

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que era preparado para emprender vuelo Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Vio todo desde arriba

    Su hermano lo ayudará a volar su helicóptero.

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que regresaba a Tocumen.

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que era preparado para emprender vuelo Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Vio todo desde arriba

    Su hermano lo ayudará a volar su helicóptero.

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que regresaba a Tocumen.

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que era preparado para emprender vuelo Fotos: ROBERTO BARRIOS

  • Vio todo desde arriba

    Su hermano lo ayudará a volar su helicóptero.

  • Vio todo desde arriba

    Momentos en que regresaba a Tocumen.

Leynis Cedeño - DIAaDIA

Se cumplió un sueño. Ayer, desde muy temprano el niño Abrahán González estaba despierto y vestido esperando que personal del Servicio Nacional Aeronaval (SENAN) fueran hasta su residencia a buscarlo para hacerle realidad uno de sus mayores sueños: “ver todo desde arriba”.

A eso de las 7:00 a.m. este soñador fue conducido hasta la base de Tocumen en donde su alegría se reflejaba en sus ojitos que brillaron más de lo normal al ver el helicóptero que le daría el paseo de sus sueños. Desde allí emprendió vuelo dando un recorrido por diferentes lugares de la ciudad, entre ellos el Canal de Panamá.

Al llegar a la base del SENAN en Cocolí, Abrahán su padre y hermanito participaron de una eucaristía en donde se pidió por la salud de este pequeñín y su familia.

Terminada la misa, los comandantes de la institución le hicieron entrega del segundo sueño, que era tener un helicóptero a control remoto. Esto provocó que una enorme sonrisa se dibujara en el rostro del pequeñín, quien no puede caminar producto de un atropello que sufrió tiempo atrás.

La institución también le entregó productos de primera necesidad como pañales desechables, leche y medicinas.

Pero no todo quedó allí, ya que para regresar a su casa nuevamente Abrahán voló en helicóptero hasta Tocumen y posteriormente regresado a su casa con dos de sus sueños cumplidos faltando solo uno que sería la caminadora que se está a la espera de que los médicos den el tamaño adecuado para que un amigo secreto se la regale.

Abrahán, de nueve años y sus ocho hermanos necesitan más ayuda como mejoras en su casa para que él se pueda movilizar mejor y alimentos para todos.

 
suscripciones