Otros que ayer fueron sometidos a un proceso de indagatoria, son los hermanos Próspero y Ariel Ortega Justavino, el propietario y el conductor del bus Corredor - Mano de Piedra, que se incendió el pasado 23 de octubre y que cobró la vida de 18 panameños. En sus declaraciones, los vinculados con este caso dijeron desconocer de la existencia de una "conexión bruja", al sistema de aire acondicionado del bus, lo que se presume originó el incendio.

Ambos presentaron pruebas documentales a su favor, ante las autoridades. La fiscal Zuleyka Moore está llevando este caso.