VIVENCIAS

Costosa educaci�n


Joany De Gracia

Tener a un hijo en una escuela p�blica o privada ya no marca la diferencia ante la exigencia de materiales, libros, copias, tareas o trabajos costosos, a cambio de una buena nota.

Antes, redactar a mano, recortar y pegar figuritas ayudaba a los estudiantes a desarrollar las habilidades psicomotoras, hoy la mayor�a de los docentes exigen que las tareas e investigaciones sean elaboradas en computadoras e impresas.

Es positivo que los estudiantes est�n c�nsonos con la tecnolog�a, pero los educadores tienen que comprender que no todos tienen una computadora en casa ni tampoco sus padres tienen los recursos econ�micos para cumplir con tantos requerimientos.

Sumada a esta realidad, muchos estudiantes solo van con el pasaje y a veces ni siquiera tienen para ir porque a sus padres no les alcanza el dinero.

Menciono como ejemplo el caso de una alumna de la escuela Jos� de San Mart�n, en San Miguelito, que se destaca por sus buenas notas; sin embargo, su maestra le puso uno por no llevar un material solicitado; no porque la ni�a no quiso llevarlo, sino porque su madre no pudo compr�rselo. Esta injusta decisi�n le da�� el promedio a la estudiante que a�n llora desconsoladamente. &162;No es justo!