Las callosidades son zonas de crecimiento acelerado de la capa externa de la piel.

Estos crecimientos causan inflamación y dolor, y se producen usualmente por fricción de la piel de la zona afectada con los zapatos muy ajustados o algún problema ortopédico de los pies.

CAUSAS

• Usar calzados que no calce correctamente.

• Empelotamiento de las medias alrededor de los dedos.

• Medias con costuras que rozan los dedos.

• Anormalidad en los pies que causa una protrusión que roza contra el calzado.

SINTOMAS

• Piel endurecida.

• Piel gruesa.

• La piel puede estar escamosa, áspera y seca.

TRATAMIENTO

El tratamiento de los callos incluye, en general, el auto-cuidado y medicación. En casos graves, puede resultar necesaria una cirugía menor. Las personas con diabetes o problemas circulatorios deben ver a un médico o podólogo para el tratamiento de los callos. En el caso de dichas personas, el auto-tratamiento puede acarrear una infección grave.

CONSEJOS

Si el callo es muy molesto, le recomendamos remojarlo en agua tibia de 5 a 10 minutos y después limarlo con piedra pómez, no trate de eliminarlo por completo la primera vez. Debe repetir el tratamiento 2 veces por semana.

• Aplíquese en el área afectada gel de sábila (áloe vera).

• Frote aceite de ricino sobre los callos dos veces al día.

Si después del tratamiento el callo persiste y es muy doloroso, le recomendamos visitar a su médico para una evaluación de su estado de salud.

No olvide que la prevención y detección a tiempo pueden ayudarle a vivir mejor.