La niebla se podía cortar como si fuera mantequilla. ¿Fue esa la causa del accidente? Las autoridades investigan. Según moradores de La Laguna de San Carlos, poblado cercano al Cerro Peña Blanca, lugar de los acontecimientos, las inclemencias del tiempo pudieron ser la razón del accidente.

Las víctimas son: la abogada Itdania Puga, el doctor Ovidio De León y Carlos Arango, propietario de la aeronave, así como los capitanes Octavio Arrivillaga y Aquiles Ortega.

DESTINO

Eran las 9: 46 a.m. cuando despegó la aeronave con destino al Aeropuerto del Ingenio Ofelina, para luego dirigirse al poblado de Pocrí, en Aguadulce, a fin de presenciar el entierro del hijo de Alejandro Ríos, pero jamás llegaron al lugar.

Aparentemente, la abogada estaba embarazada y acompañaba a Arango, propietario del Hotel Contadora, a cerrar un negocio que por razones obvias no se concretó.

Aproximadamente, a las 9: 48 de la mañana fue el último contacto que se tuvo con el avión. Mientras que lugareños aseguran que en medio de la tupida neblina, característica de estos campos, observaron perplejos cómo la aeronave se estrellaba con el imponente cerro.

LA TRAVESIA APENAS DEBíA TARDAR 35 MINUTOS.

Fue a las 10: 20 a.m. cuando una llamada a la Policía alertó del siniestro, momento en que empieza la búsqueda del servicio de tránsito y navegación aérea del SAN y Aeronáutica Civil, por el área boscosa.

SE SALVO

¿Milagro o destino? José Feullet tenía que abordar la avioneta, pero no pudo llegar a tiempo, lo que le salvó la vida. Feullet vive en Tocumen y sólo pudo decir que trabajaba para el señor Carlos Gabriel Arango y tenía que acompañarlo en el viaje; además, lamentó la muerte de su jefe y demás pasajeros.

DIFICIL

Debido al clima, los helicópteros de rescate fueron retirados del cerro y quedaron en la calle para facilitar el traslado de los cuerpos.