"Un hombre amable, sencillo y de buen corazón", así describieron al doctor Ovidio De León sus familiares y amigos, quienes a más de cinco días de su fallecimiento, no aceptan su irreparable partida, y ayer en un acto lo recordaron tal y como fue en vida.

De León fue uno de los cinco ocupantes que falleció a bordo de la aeronave, que el pasado jueves 24, se accidentó en el cerro Peñas Blancas de San Carlos.

En medio del llanto y sollozos de dolor se realizó una misa en su nombre, en la Iglesia de Linda Vista en la ciudad y un rosario en el parque Sara Sotillo, del residencial del mismo nombre, para dar gracias a Dios por haber permitido a familiares y amigos el placer de haberlo conocido y gozar de su compañía.

Según amistades, Ovidio era un hombre de prontas decisiones, tanto así que siempre se desempeñó como un líder innato, logrando ser asesor del actual Ministro de Salud, además de llevar bajo su cargo la Dirección Nacional de Contingencias. Era un político de nacimiento, pues fue candidato a legislador.

En la reunión estuvieron presentes su esposa, hijos y su madre Elvia, quienes no pararon de llorar.

El cuerpo del galeno fue cremado y el próximo miércoles serán sus honras fúnebres en la iglesia Santísima Trinidad, de El Dorado, a las 11: 00 a.m.