Este avance estuvo acompañado por una mejora en la esperanza de vida al nacer, ya que los panameños duran en promedio 71 años. Lo segundo es que los años esperados de escolaridad del país son de nueve años, es decir, la mayoría acude a la primaria y primer ciclo.
Las áreas que el Estado debe prestar atención, siguen siendo la distribución per capitá del ingreso, la pobreza extrema, entre otras. Ambas ligadas a una bonanza económica que no permea las capas bajas de la sociedad, para ello se deben aplicar políticas públicas atinadas, sostuvo Paulina Franceschi, coordinadora nacional del IDH.