El 70% de los suelos panameños son ácidos, y es muy importante el seguimiento al deterioro que está sufriendo la tierra, tanto en el PH como en sus propiedades, indicó José Villarreal, jefe del Departamento de Investigación del Instituto de Investigación Agropecuaria.
Detalló que ese porcentaje se encuentra en la región central del país, oriente chiricano, Veraguas, parte de Bocas del Toro, alguna región de Colón, Coclé y la provincia de Panamá. “Siendo Panamá un país con precipitación pluvial abundante, donde se lixivian y se lavan fácilmente el calcio, el potasio y el nitrógeno y se contaminan los ríos, es necesario aplicar medidas.
Dijo que en Panamá hay que aprender a convivir con los suelos ácidos. Añadió que los suelos ácidos pudieron tener su origen en la roca que le dio origen al suelo, que eran rocas ácidas. Sin embargo, los investigadores del IDIAP ya le han demostrado a los productores que estos se pueden mejorar.