Gloria al ser abnegado que cuida... Cuando joven Dilsia Salazar González quería ser fisioterapista, pero una experiencia personal le cambió la vida. Desde ese momento consideró cambiar su futuro profesional, es así como decide formarse en docente integral e instruir a niños que presentan una condición de discapacidad, logrando así obtener una plaza docente en el Programa de Parálisis Cerebral del Instituto Panameño de Habilitación Especial (IPHE). Este trabajo le ha permitido obtener muchas satisfacciones tanto personales como económica, hoy está muy contenta por su decisión.

DOCENTE ESPECIAL

Atender y enseñar a personas con discapacidad no es tarea fácil, eso lo sabe muy bien Dilsa. "Sé que las personas con discapacidad requieren un poquito más de esfuerzo y atención que las personas "normales, expresó.

De acuerdo con Dilsa hay que tener mucho amor y paciencia, pero luego que uno logra adaptarse a esta labor, lo que viene son experiencias agradables, momentos hermosos y sobretodo mucha alegría.

Aunque la vida le quitó a su hijo hace muchos años, ella vela por hacer de cada uno de sus estudiantes una persona ejemplar y segura, dotándolo de los conocimientos necesarios para continuar su vida.

Solo soy un instrumento de Dios para enseñar a otros mis conocimientos. También fui madre y tras mi pérdida decidí ser maestra especial para compartir todo mi amor y cariño con otros niños que a veces lo único que piden es una oportunidad, conmovida, pero muy bendecida, recordaba Dilsa, su paso por la vida.

Nunca se cansa de estudiar, es por ello que recientemente culminó su Postgrado en Pedagogía y Maestría en Educación con énfasis en Docencia Superior.

"Considero que nunca hay que dejar de estudiar, a mis colegas los exhorto a que continúen, porque somos el espejo para nuestros queridos, amados y recordados estudiantes", concluía con esos ojos llenos de esperanza de saber que ella como docente cada día contribuye hacer más y mejores profesionales.

¡FELICIDADES!

DIAaDIA felicita a todos los docentes de nuestro país que al igual que Dilsa, en algún momento de su vida se olvidan de sus compromisos personales para formar profesionales de calidad.