
Ángela se ha destacado por ser una atleta eficiente en sus funciones.
Foto: Laureano Barria
Ángela se ha destacado por ser una atleta eficiente en sus funciones.
Foto: Laureano Barria
Ángela se ha destacado por ser una atleta eficiente en sus funciones.
Foto: Laureano Barria
Sueña con una carrera universitaria.
Foto: Laureano Barría
Es una atleta extravertida
FICHA
Ángela se ha destacado por ser una atleta eficiente en sus funciones.
Foto: Laureano Barria
Sueña con una carrera universitaria.
Foto: Laureano Barría
Es una atleta extravertida
FICHA
Ángela se ha destacado por ser una atleta eficiente en sus funciones.
Foto: Laureano Barria
Sueña con una carrera universitaria.
Foto: Laureano Barría
Es una atleta extravertida
FICHA
Ángela se ha destacado por ser una atleta eficiente en sus funciones.
Foto: Laureano Barria
Sueña con una carrera universitaria.
Foto: Laureano Barría
Es una atleta extravertida
FICHA
Ángela se ha destacado por ser una atleta eficiente en sus funciones.
Foto: Laureano Barria
Sueña con una carrera universitaria.
Foto: Laureano Barría
Es una atleta extravertida
FICHA
“Es difícil encontrar a un deportista al que solo le guste una disciplina”, esta fue la respuesta espontánea que dio la futbolista y también jugadora de voleibol Ángela Evans, refiriéndose al porqué de su amor por dos deportes.
Oriunda de Villa Lorena (San Miguelito), ella recuerda cómo fue su infancia y de cómo llegó su primer amor: el fútbol. “Mi papá fue portero de la selección en 1992 y, como podrás imaginarte, en la casa lo que sobraba eran balones de fútbol”, comentó.
Evans viene de una familia de cinco hermanos, en la que el pilar deportivo fue su padre, Angelo Evans, quien desde muy pequeña le inculcó el deporte de las fintas.
Hace solo unos meses, la delantera de la selección sub-20 estuvo en el Premundial, en el que desafortunadamente se lesionó. “Sufrí una ruptura del ligamento cruzado anterior y meniscopatía, pero eso no fue suficiente para alejarme de las canchas. Es más, estoy aquí de vuelta gracias al tratamiento que me dieron”, dijo la seleccionada nacional.
Su primer contacto con el voleibol.
“Un día estaba viendo una competencia en la televisión en la que jugaba Panamá, y eso fue amor a primera vista”, así describió la chica el momento exacto cuando nació en ella las ganas de jugar al voleibol. Para ese tiempo, Evans estudiaba en el Instituto Fermín Naudeau, y gracias a la intervención del profesor Juan Girón –profesor de Educación Física- se le dio la oportunidad.
“Él (Girón) me dijo que tenía una buena estatura y que iba a hablar con algunas amistades para ver si me hacían unas pruebas”, así fue como comenzó todo.
Días después, llegó a la oficina del entonces presidente de la Federación Panameña de Voleibol (FPV), José Beto Remón, y este le dijo que comenzaba a practicar la semana entrante.
Con el pasar del tiempo, Evans se ha ido afianzando en el voleibol panameño, hasta llegar a quedar entre las mejores 50 competidoras en un torneo Norceca, en el que vieron acción contra los mejores equipos del área: Cuba y República Dominicana.
“Sé que me queda mucho por aprender en este deporte, pero lo que tengo claro es que me siento feliz de representar a Panamá en cualquiera disciplina que sea”, dijo Evans momentos antes de terminar la entrevista.
Sueños
Antes de lesionarse, la panameña tenía una beca para estudiar en el extranjero, pero lastimosamente no pudo lograrla. Una de las metas sería “poder algún día jugar (fútbol) en un club internacional”, y de igual forma, “estudiar una carrera universitaria para ser una profesional”.
En la actualidad, la chica cuenta con un bachiller en Ciencias, por lo que espera lograr una carrera universitaria en el futuro.