Por el momento, ninguno de los trabajadores de las fincas bananeras independientes de la provincia de Bocas del Toro será despedido. A este acuerdo se llegó luego de que el ministro de Trabajo y Desarrollo Laboral, Edwin Salamín, se reuniera con la dirigencia sindical.
Salamín admitió que la situación por la que atraviesan los bananeros es crítica; sin embargo, les solicitó la suspensión de los despidos porque no son oportunos.
Se hará una evaluación de las afectaciones y dentro de dos semanas se volverán a reunir para plantear la solución.
Por su parte, Luis Nuques, bananero independiente, aseveró que no pueden ser optimistas, porque si en dos semanas el Estado no les da una respuesta positiva, tendrán que despedir a 700 trabajadores.