La centenaria abuelita colonense Celia Torres de Chiari se robó el "show".
Ella le hizo honor a su frase favorita: "Como la sal y la manteca, ni me hago ni me deshago".
En el momento en el que la gobernadora y presentadora de esta gala le entregó el dinero que le habían otorgado los organizadores, ella al principio no lo quería aceptar, pero después de muchas explicaciones lo tomó y adivinen dónde lo iba a guardar: en el sostén. ¡Je, je, je!
Aunque las asesoras de su barra la acicalaban en los comerciales, ella de vez en cuando se aburría y se "arremangaba" el vestido, eso sí, cuando regresaban de las pautas comerciales volvía y quedaba en pose como si fuera una actriz. ¡Qué artista!