
Haga de ese momento, algo especial, transmita amor a su hijo, mírelo a los ojos, acariciélo y háblele.
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La importancia de la lactancia materna está más que demostrada, puesto que contiene todos los nutrientes que el bebé necesita para poder crecer de manera saludable.
Durante esta etapa existe un gran desarrollo y formación de tejidos, para lo cual la buena nutrición es fundamental. La leche materna es la fuente alimenticia más importante del bebé en sus primeros meses de vida y es el primer vínculo entre la madre-hijo.
Para que el crecimiento, el desarrollo y la salud sean óptimos, hay que alimentar a los lactantes exclusivamente con leche materna durante los seis primeros meses y a partir de ese mes, agregar alimentos complementarios que proporcionen suficiente energía y proteínas para cubrir las necesidades nutricionales del niño en el crecimiento.
Es muy común que se les recomiende a las madres tomar o comer muchos alimentos que contengan leche para aumentar la producción de buena leche materna. Eso es un mito, sin embargo, la producción depende únicamente del estímulo que realiza el bebé al succionar. Cada vez que las glándulas mamarias se vacían, éstas generan más leche y, por lo tanto, a mayor succión habrá más producción de leche.