Madres que valen oro
En el ION hubo serenata. (Foto: : Josué Arosemena/Aquilino Pérez)

Milagros Murillo, Kathyria Caicedo, Didier Gil, Carolina Sánchez | DIAaDIA

En cada casa, en cada familia hay una madre, una abuelita que tiene su historia muy particular y que atesoran en su corazón. Hoy DIAaDIA decide rendirle tributo a ellas, ese pilar en la vida de cada ser humano, por la simple y sencilla razón de que es el Día de Las Madres.

LIDER DE LA TROPA

"Tengo una familia grande como las estrellas del cielo y las aguas del mar". Como afirma este verso de la biblia, lo hace Teódula Córdoba de Gálvez cuando se refiere a sus 10 hijos.

La señora "Negra" como todos le dicen, tuvo 16 hijos, de esos quedan 5 mujeres y 5 varones vivos. Aunque ella es oriunda de Colombia, desde muy pequeña vino a vivir a la provincia de Darién con sus padres. A medida que fue creciendo fue recorriendo parte del país hasta llegar a Samaria, Veranillo, en San Miguelito, lugar donde reside actualmente.

Está casada, pero como su esposo trabajaba en un barco, tuvo que lidiar con la gran responsabilidad de llevar el peso de una gran familia.

Cada Día de las Madres es un día especial para ella, pues dice: "Me siento contentísima, alegre, satisfecha de tener tantos hijos, es un día muy especial para mí". Y es que "Negra" ya ha perdido la cuenta de cuántos nietos y bisnietos tiene. Una vez los conté y tenía 52 nietos, 62 bisnietos, pero ahora vinieron más, destacó esta ejemplar madre. Además tiene 11 tataranietos.

Siendo ama de casa tenía que estar pendiente de cada detalle de cada uno de ellos.

Al preguntarle cómo ha hecho para llegar en buenas condiciones físicas a su edad, contentó entre risas que "comprando vida donde los médicos, ir cada vez que me siento mal, hay que cuidarse".

A sus 81 años, esta señora de cálida mirada recuerda cómo era su vida "con su tropa" como ella les dice. Recalcando que ahora la juventud solo quiere tener como máximo tres hijos, "Yo les digo que no se pongan a planificar los hijos, si Dios los manda ¿por qué no tenerlos?".

AMOR POR EL PROJIMO

En su barrio la consideran como "la madre alegre que luchó por sus hijos", pese a que se ha enfrentado a este reto sola. Esa es Eva Piter, una señora que tiene siete hijos, seis varones y una mujer. Aunque no vivía con el padre de sus hijos, Eva logró que ellos fueran profesionales y de eso dan fe los residentes de Calle 1ª Parque Lefevre, donde vive esta madre abnegada.

Con mucho orgullo, Eva relató que tiene en su familia un sargento de la Policía, un jefe de cabina en la agencia Copa Airlines, un cabo de Tránsito, un funcionario de Salud, los otros laboran en la industria de la construcción, en un almacén y su única hija es auxiliar de vuelo en la misma agencia en la que labora su otro hijo, pero reside en Argentina, donde se casó. Cuando Eva narraba sobre sus hijos sus ojos brillaban.

Esta madre ejemplar trabajó en casa de familia y también fue billetera.

Definitivamente que la señora Eva tiene un corazón grande para amar. Tanto es así que desde hace doce años se viste de Santa Claus, para una fiesta de Navidad que les ofrece a los niños del Hospital del Niño. Esa misión la cumplirá el próximo 21 de diciembre.

DIAaDIA pudo conocer que Eva Piter emprendió esta iniciativa mientras se dedicaba a coser la ropa de cama del Hospital Santo Tomás, especialmente en las salas de los internos con problemas pulmonares y en la de los privados de libertad. Por todo lo anterior, Eva afirmó: "Mis hijos me adoran".

Piter también forma parte del grupo de voluntarios de la Fundación Pro Enfermos de Cáncer, quienes en el día de ayer recorrieron los pasillos y salas del Hospital Oncológico regalando rosas amarillas a todas las madres al ritmo de serenatas.

"MAS QUE CONFIANZA"

Aminta Jiménez, de El Chorrillo, es madre de cuatro hijos. Para ella, no ha sido nada fácil su tarea de madre, pues los tentáculos del ocio están a la orden del día en este barrio. Es por eso por lo que considera que allí ya los niños no tienen infancia y puso de ejemplo que en este tiempo de fiestas de fin de año cuando estallan las bombitas, a sus sobrinos pequeños, lo primero que se les viene a la mente es "bala".

Jiménez dijo que para criar a los hijos en esta comunidad lo primordial es tener confianza con los hijos y hablarle de valores. Aminta recalcó que "el barrio no hace a la persona".

Esta madre chorrillera alegó que este año su mayor satisfacción es que su hijo Jorge Luis Lombardo logró viajar a estudiar Oficial de Marina en Chile.

RECUERDOS...

"Toda mi vida Dios ha sido mi sostén y apoyo". Contando los nietos y bisnietos que tiene, Tomasa Solís memorizó cómo vino del distrito de Cañazas en Veraguas con su pequeña niña de tres años, hasta la ciudad. Con una mente lucida a sus 81 años, con gran nostalgia recordó todas las vivencias que pasó para salir adelante con sus hijos.

"Cuando vine a la ciudad, pasé mucho trabajo. Logré conseguir un empleo en Panamá Viejo en una casa de familia en donde laboraba como cocinera. Ahí me daban la oportunidad de estar junto a mis hijos y darles de comer", aseguró Tomasa.

Ella contó que ganaba B/12.50 por mes y con eso trataba de darle un poco de cada cosa y enviarlos a estudiar.

Tomasa dijo que hubo un tiempo en que se sentía sola con sus dos pequeños hijos Bertilda y Germán. Hoy día siento que valió todo el sacrificio que viví con mis dos hijos.

Tomasa narró que su segundo hijo nació un 8 de diciembre, pero que ocho días después murió, lo que le trae un amargo recuerdo, pero hoy día disfruta del amor de sus hijos, nietos y bisnietos en su casa que está ubicada en Samaria en el distrito de San Miguelito.

UNA BISABUELA MUY ALEGRE

Muchos recuerdos yacen en la memoria de "Mama Cheba" y es que ya son 81 años entre alegrías y tristezas. Cada vivencia que "Cheba" logra traer a su mente despiertan un sentimiento, en especial esos que son más dolorosos. Eusebia Pinto de Arosemena es su nombre. Ella es oriunda de Chame. Primero vivió en Calle 14, en San Felipe y luego, hace ya 60 años, en Pueblo Nuevo, donde su esposo, Julio César Arosemena (q.e.p.d.) construyó su residencia, ubicada en calle 22.

Al llegar, "Mama Cheba" estaba sentadita en el portal esperando nuestra llegada y enseguida abrió el cofre de los recuerdos. Cuatro fueron sus retoños, habló en tiempo pasado porque una ya no está con ella. Se trata de Diana Cecilia, quien falleció en un accidente. Sin embargo, "Mama Cheba" aún cuenta con los abrazos de Aura, Jaime y Leonardo, y de sus siete nietos y tres bisnietos. Cuenta su nuera, Edith que a Eusebia todos la conocen, porque es una mujer cooperadora y trabajadora, que cuando va a la Iglesia, todos la saludan: "Mama Cheba" y es que esta señora es una de las fundadoras de dicho templo.

Recuerda Eusebia, que hace muchos años se encargó de cuidar a una niña cuya madre la dejó a su cuidado hasta los diez años, pero luego se la llevó, dijo con la voz un tanto quebrada. "Pero ella siempre viene", recordó enseguida y una sonrisa se dibujó en su rostro. Dicen que sus macarrones con camaroncitos secos son los mejores, mientras que "Mama Cheba" recuerda que en Pascua sí comían rico. Allí la dejamos, entre sus matas, -porque adora cultivarlas- esperando que hoy tenga un feliz Día de las Madres.

SOLIDARIOS

La visita del grupo de voluntarias de la Fundación Pro Enfermos de Cáncer, arrancó aplausos, gritos de júbilo, suspiros profundos y hasta muchas lágrimas. En este acto se recordó la labor solidaria de Marta Stella de Vallarino, quien emprendió en vida una gran lucha por la dignidad de las mujeres con cáncer.

Ciudad de Panamá 
Copyright © 1995-2007 DIAaDIA-EPASA. Todos los Derechos Reservados