Los cuchillos son una herramienta indispensable en cada cocina, por eso, cuando un cuchillo no tiene filo la labor se vuelve tediosa y casi imposible de realizar. Para erradicar ese problema y no tenga que estar afilando todas las semanas los cuchillos, aquí tiene un remedio práctico. Lo único que debe hacer es procurar guardar los cuchillos en un recipiente lleno de aserrín y verá que siempre estarán filosos.