En una trampa de muerte se ha convertido el tramo de la carretera Interamericana, desde la entrada del Rincón de Santa María hasta la salida de ese poblado, porque está llena de profundos huecos.
En unos tramos hicieron hoyos, parece que con la intención de reparar las losas de concreto, pero nadie sabe qué sucedió que no hay ningún letreros ni maquinarias en la vía.
Las empresas y moradores a orillas de la carretera han tenido que tirar arena para amortiguar el impacto, pero eso es más peligroso, según los conductores.
Para completar, esta vía es muy oscura y los conductores no ven los huecos, que no hay forma para esquivarlos. Esta calle es de dos vías, una para ir y otra para regresar, y ambos paños están destrozados. Al MOP, antes del cambio de Gobierno, que las reparen.