
Triste, amigos, pero todo ocurrió afuera del edificio donde vive el reconocido presentador, en el área de Río Abajo. Miren que cuando Franklyn se percató de lo que había pasado, estaba que echaba fuego como un dragón, ya que él había tomado la decisión de estacionarlo afuera, porque días atrás lo habían chocado y la aseguradora tenía que pasar a buscar el carro para llevárselo en grúa, pero esto nunca pasó y los que sí llegaron fueron los maleantes, quienes rompieron algunos vidrios y se llevaron el radio. ¡Áyala vida!