Una experiencia le dio un giro a su vida. Una vez ella recibió asistencia de los voluntarios del Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC), luego de un accidente de tránsito en 1999 en el corregimiento de Las Mañanitas, y quedó esa inquietud por servir a la comunidad de la misma manera con que fue atendida.
Hoy día, Nilsa Molleda es voluntaria de SINAPROC y se desempeña como instructora de diferentes disciplinas en la capacitación de guardavidas, específicamente en el campo de la metodología de la enseñanza.
En plena acción la encontramos en la playa Gorgona de Chame en el reciente curso para instructores de guardavidas, donde le daba ánimos a los aspirantes a instructores de guardavidas, bajo un inclemente sol y luego de varios días de ajetreo.
Ella narró que le fascina dar instrucciones en las comunidades en materia de prevención. Recordó que para ella fue gratificante saber que cuando sufrió el accidente de tránsito, había personas que estuvieron a la disposición para atenderle, además de otros casos de urgencia.
De su experiencia de servicio, dijo que estar conforme con su labor en las coberturas de verano en los ríos de Chepo y Pacora.
Molleda sustentó que estas experiencias son buenas, ya que es gratificante saber que uno puede aportar su granito de arena en momentos en que alguien necesita ayuda.
Nilsa es maestra en la Escuela República de Puerto Rico y no tiene hijos; sin embargo, su familia le dice que ella le dedica mucho tiempo a su "voluntariado", pero reveló que en el fondo sus familiares la comprenden y la apoyan.
CUALIDADES
Nilsa es muy colaboradora y se encarga de incentivar a los nuevos voluntarios; es decir, los que serán su relevo.
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