
El caso de la enfermera Jacintha Saldanha, que se suicidó la semana pasada, tras recibir una broma telefónica de una radio australiana que quería saber del embarazo de la duquesa Kate, sigue generando información. Ayer se supo que la enfermera dejó una carta a su familia en la que le dice que pida respuestas al hospital, así explicó el periódico “The Daily Mail”.