Se pierden $4 millones

Unos 4 millones de dólares se pierden desconsideradamente en el gimnasio padre Segundo Familiar Cano, en el corregimiento de Llano Bonito, distrito de Chitré, provincia de Herrera, por el estado de abandono en que se encuentra.

La obra presenta serias deficiencias en los trabajos de reconstrucción.

Según la hermana María González, presidenta de la Fundación Comunidad de Alianza Santa Teresa de Jesús, organización a nombre de quien el padre Segundo Familiar Cano (q.e.p.d.) dejó el gimnasio, los estudios efectuados por la Universidad Tecnológica de Panamá indican que usar la obra como está, es un peligro.

La UTP recomienda quitar el techo que se colocó, cambiar la soldadura utilizada en el techo y demoler dos columnas que están mal colocadas y erigirlas en el lugar que se había señalado. Una vez hecho esto, el gimnasio estará en condiciones para ser utilizado. Esto tendría un valor económico cuantioso.

La obra es un emblema a la desidia y gran parte de las infraestructuras han sido vandalizadas. El sistema eléctrico fue destruido en su totalidad por los ladrones para extraer el cobre, hay puertas dañadas y otras fueron hurtadas. El sitio, pese a los candados, está siendo utilizado por los vecinos como pasadero y hasta llevan a pastar el ganado en el extenso monte que rodea la infraestructura.

“La Comunidad de Alianza de la Iglesia de Llano Bonito de Chitré desea concertar una reunión con el presidente de la República, Ricardo Martinelli, con el fin de expresarle la inquietud y buscar ayuda para culminar la obra que tanto el padre Segundo como nosotros, miembros de la fundación, estamos deseosos de que se termine”, dijo Manuel Ruiz R., secretario de la fundación.

Por su lado, en el Programa de Ayuda Nacional (PAN), que tiene a cargo la obra, aunque indican que no están autorizados para dar declaraciones, un funcionario de esta entidad, que tiene vasto conocimiento del proyecto, accedió a manifestar que el gimnasio no hay que demolerlo como se ha dicho.