Diciembre es el mes de las compras, cuando mucha gente se vuelve loca gastando dinero. �Jo! Es que solo hay que darse la vuelta por cualquier centro comercial y usted lo ver� de bote en bote...
Las filas para forrar regalos se hacen interminables, mujeres que para ganarse un �real� se la pasan horas y horas de pie forrando regalos y a veces les toca forrar unas locuras que las pobres tienen que ingeni�rselas...
Recuerdo que una amiga, la primera vez que trabaj� fue forrando regalos y una ocasi�n le toc� envolver una nevera, �se imaginan eso?
Pero por Dios, hay gente que de verdad la bota, solo el lunes me toc� esperar en una farmacia reconocida y entre tanta forradera, lleg� una familia que mand� a envolver desde un peluch�n (normal) hasta una vela (que ni olor ten�a, agreg� mi amiga) y para rematar una barra de chocolate, o seaaaa... �Ah!, y con lazo y todo.
Las forradoras se tienen que aguantar de todo, clientes ma�osos, groseros, personas que muchas veces no pensamos que esa pobre mujer quiz�s no ha podido tomarse ni un vaso de agua, pero a pesar de ello, en su mayor�a, tratan de ser pacientes y complacer a todos.
Imagino que dan gracias a Dios cuando les llevan un regalo que va en una cajeta, porque hay otros que qu� va, no hay manera de forrar.
Y ni hablar cuando llegan a casa, lo m�s seguro es que ponen la cabeza en la almohada y ah� mismo caen del agotamiento.