Un grupo de arrendatarios del Mercado Público de David cerraron ayer, a las siete de la mañana, las vías que dan acceso a este centro de abastos, en protesta por la demolición. Además, quemaron un muñeco representativo, según ellos del alcalde del distrito de David, Francisco Vigil.

Gisela Rodríguez, una de las afectadas con la medida, señaló que el Alcalde no quiere darles solución y podrían quedar en la calle.

También preguntó dónde está la plata que se ha recaudado de impuesto a los 71 arrendatarios del mercado público durante tantos años.

Francisco Vigil, alcalde de David, informó que se está aplicando una encuesta a través del Departamento de Trabajo Social para determinar quiénes en el mercado dependen de esta actividad.

"Allí hay personas que tienen recursos económicos y no necesitan de este puesto", afirmó Vigil.

El Ministerio de Salud ha emitido en diferentes ocasiones notas en la que califica de insalubre las instalaciones del mercado público.

Los davideños quieren que se mejoren las estructuras del mercado y que deje de ser zona roja.