Pasión por el voleibol y la pasarela

Entrega. Para unos es una combinación poco ortodoxa, pero eso es lo que menos le roba la calma a la jugadora de la selección panameña de voleibol María De Lourdes Gallimore, quien además de ser una modelo próspera, vive el deporte con la misma intensidad que cuando está en la pasarelas.

Paradójicamente, la chica de 23 años primero tuvo su encuentro con el fútbol en el instituto Fermín Naudeau, pero parece que el destino le tenía algo diferente.

“Jugaba fútbol con el equipo del colegio, entonces el profesor Alberto Rojas pensó que podría ser buena en atletismo”, así recuerda Gallimore sus inicios. Cuando practicaba atletismo (salto alto) el entrenador la ponía a practicar con las chicas del voleibol y ahí fue que le agarró el ‘gustito”, explica la chica.

Llegada a la selección

Ese mismo año –el 2006- le llegó la oportunidad de jugar en la Liga Gubernamental de Voleibol, con el equipo de la Contraloría.

“Eso fue gracias a mi amiga Stephanie Britton, quien me llevó a jugar”, recuerda la atacadora auxiliar (4) del seleccionado criollo.

Desde ese entonces, se le abrieron las puertas del deporte y otras aficiones, como lo es el modelaje, ya que fue en el mismo 2006 cuando entró a un curso en la agencia Tania Hyman Model and Talent y de esa forma se abrió el telón del espectáculo.

“Estuve en un curso de seis meses y cuando terminé me contrataron”, explicó la atleta.

¿Y el voleibol?

Resulta que practicar voleibol nunca fue un problema para el modelaje, al contrario, ya “en la agencia sabían que yo jugaba”, dijo.

Desde entonces, esta deportista de Parque Lefevre maneja su vida en torno al voleibol, el modelaje y una licenciatura en turismo geográfico ecológico que estudia en la Universidad de Panamá (UP).

Con relación a su familia y a las personas más allegadas a Gallimore, esta comentó que su familia le “da un apoyo al 100%” y además su pareja (novio) siempre “la entiende cuando tiene que salir del país, ya sea por el modelaje o por el voleibol”.