"Lo importante es que estoy feliz", dijo el pequeño Javier Cantule, de 10 años. Este pequeño forma parte del grupo de 18 niños residentes en la casita N. 7 llamada Sol Ardiente en la Ciudad del Niño. Y es que los chicos tuvieron una grata sorpresa cuando el equipo de DIAaDIA les llevó un poco de alegría con una fiesta navideña.

En sus rostros se dibujó la sonrisa al ver los regalos, pues ya para ellos la Navidad había llegado.

RESIDENTE

Charles Martínez es otro de los niños residentes en la casita y le encanta el fútbol.

Como le gusta el fútbol, le regalaron un balón; tal fue su sorpresa cuando su "madrina" le dio ese regalo. "Eso era justo lo que quería", expresó.

DISFRUTARON AL MAXIMO

Fueron tres horas de diversión. Los niños pudieron disfrutar de los actos del payaso Cocobolín y su amiguita Arco Iris; además de golosinas, regalos, música y la participación de los chicos de "Vive la Música", quienes con canciones navideñas inspiraron a todos.

NOBLE CAUSA

Wendy Quintero es la encargada del hogar. Ella tiene seis años de trabajar allí. "Esto es algo con lo que te sientes bien, más sabiendo que los niños te necesitan", dijo.

Los pequeños que habitan en la Ciudad del Niño, como afirma Marisol Bartuano, trabajadora social del lugar hace 30 años, son aquellos que sus padres no pueden cubrir sus necesidades básicas como educación, salud y vivienda. También hay niños huérfanos y abandonados.

LOS PREPARAN

En la Ciudad del Niño, ubicada en el distrito de La Chorrera, sus habitantes tienen la oportunidad de asistir a la escuela, de recibir atención médica e instruirse para que cuando salgan de allí tengan una profesión digna.

Los más grandes reciben talleres de ebanistería, soldadura, panadería, viveros y hortalizas.

No sólo los niños se capacitan, sus padres también reciben cursos de belleza, modistería, cocina y alfabetización.

Tanto los niños, así como los visitantes, compartieron momentos agradables. ¡Feliz Navidad!

DELEITARON

Kassandra, Katherine, Evaristo y Karla, de Vive la Música, animaron con villancicos y las canciones que interpretaron en el concurso. Mientras que los pequeños y los periodistas de DIAaDIA, con las manos arriba, coreaban encantados.