No se quede solo. Es necesario buscar compañía, confiar en alguna persona; contarle qué pasó y cómo se siente al respecto.
HAGA ALGO
Una solución fundamental es formar parte de actividades que ayuden a sentirse mejor. Salir de casa y hacer ejercicio ayuda mucho, aunque sólo sea el dar un largo paseo, ir a un juego deportivo o participar en actividades recreativas, religiosas, sociales o de otro tipo, y leer un buen libro.
UNA DIETA COMPLETA Y EQUILIBRADA
Cuando hay depresión no apetece comer. No importa. La fruta fresca y las verduras están especialmente recomendadas. Las personas con depresiones graves pueden perder peso y perder sus reservas de vitaminas, lo cual las hará sentirse peor. O, por el contrario, pueden ganar peso al comer demasiado.
ALEJESE DE "AHOGAR" LAS PENAS EN EL ALCOHOL O DROGAS
No se autodestruya. El alcohol acaba por deprimir más, a pesar de que, inicialmente, y durante un breve periodo, pueda dar la sensación de un aparente alivio.
NO SE OBSESIONE CON EL HECHO DE NO DORMIR
Escuchar la radio o ver la televisión mientras el cuerpo está en reposo ayudará, incluso, si usted no se encuentra adormecido, y se sorprenderá quedándose dormido por el simple hecho de no estar preocupado por su insomnio.
METAS REALISTAS
Trate de no asumir una cantidad excesiva de responsabilidades. Las metas deben dividirse en partes pequeñas, estableciendo prioridades y haciendo lo que pueda cuando se pueda.