El presidente de la comisión, el ex ministro Wim Deetman, explicó que la cifra de víctimas es "una estimación de los abusos que ocurrieron en el seno de instancias religiosas". Deetman indicó, en una rueda de prensa, que los abusos abarcan un amplio espectro, desde "contacto físico, hasta penetraciones", de las que estimó que se produjeron "unas 1.000".