HISTORIAS
¡Complácete!

Redacción | DIAaDIA

Había una vez un grillo cantor que cantaba a la orilla del mar. Mucha gente acudía a la playa todas las noches a oírlo, pues no había grillo que cantase como él.

Pero un día al grillo cantor se le acabaron las melodías, y se sintió culpable porque la gente seguía llegando y protestaba porque no había función.

El grillo cantor anunció entonces que estaba cansado y que no tenía más melodías.

Pasó un tiempo preocupado por la situación, hasta que descubrió que debía cantar también para sí mismo y no sólo para los demás.

Ahora el grillo cantor ya no canta todas las noches, pero disfruta como nunca cada una de las notas de sus bellas melodías.

Así como el grillo de esta historia, tiende a ser el ser humano.

Muchas veces se esfuerza por complacer a los demás y se olvida de sí mismo, sin recordar ni por un instante que él, de por sí, es un ser especial porque es creación de Dios.

Cuando Él lo creó, lo hizo con un fin específico, totalmente distinto al resto de los mortales.

Precisamente, eso lo hace tan especial como los demás, que también son de su creación.

En consecuencia, cada cual debe también pensar en sí mismo y complacerse, sin caer en el egocentrismo.

Ciudad de Panamá 
Copyright © 1995-2006 DIAaDIA-EPASA. Todos los Derechos Reservados