Seguirán. Marcos Polo cuenta con 71 años y tiene cinco días de tomar sol afuera de la Caja de Seguro Social, pues protesta por sus 25 dólares de aumento. Mientras el señor Polo estaba en medio de la Transístmica (con los dos paños cerrados) con su cartelón en mano, los conductores que pasaban a su lado les gritaban a los jubilados que se fueran a dormir y hasta los insultaban.

Polo dijo estar decepcionado por la sociedad en la que vive, ya que la gente no los apoya ni respeta.

Dice que de darse el incremento no sólo ellos serán los beneficiados, sino todos los demás que algún día llegarán a la jubilación.

En la misma situación se encuentra la señora Sofía Sánchez, quien comenta que en su casa está su esposo y sus nietos, quienes entienden la lucha.

Mientras Eladio Fernández, dirigente de los jubilados, expresó que en la reunión que tendrá mañana con el ministro de la Presidencia, Rafael Mezquita, espera que les aumenten, de lo contrario, el lunes, a primera hora, cerrarán los cuatro paños de la vía.