En la iglesia cuadrangular hay seis familias albergadas. (Foto: EVERGTON LEMON / EPASA)
Carolina Sánchez P.
| DIAaDIA
Yaviza sigue sumergida en agua. Antonia y su hijo Valentín son personas damnificadas por las inundaciones que azotaron desde hace nueve días en Darién. Ella se refugió en la Iglesia Internacional del Evangelio en donde salvó algunos muebles. "Tengo ocho años de vivir aquí y jamás había vivido una crecida de río como esta. Fue triste y desesperante ver como el miedo se apoderó de nosotros tras creer que nos ahogaríamos", dijo la asustada mujer.
Quien ha visitado esta comunidad sabe que una de las características de las personas es lo festivos y amigables con quien llegue a visitarlos, pero esa alegría fue interrumpida por los desastres de la naturaleza con la crecida del río Chucunaque.
VIGILANTES
Abimael Dovieza, pastor de la Iglesia Internacional del Evangelio, manifestó que aparte de la inundación tienen que estar pendiente de los enseres que salvaron, pues los amigos de lo ajeno están haciendo de las suyas en la casas de alto, en donde las personas salvaron uno que otro artículo.
Dovieza explicó que en la iglesia hay seis familias albergadas que inmediatamente que bajo un poco el caudal del río se regresaron a Yaviza para cuidar sus objetos.
Durante la noche del viernes que este medio pernoctó en el Centro Misional San Francisco Javier comprobó que las habitantes hacen una que otra ronda y con linternas vigilan sus pertenencias, pues Yaviza centro permanece sin luz eléctrica.
Para llegar a esta comunidad hay que abordar una lancha que atraviesa el río Chucunaque.