Espionaje, intrigas, rivalidades y autos veloces. Todos los ingredientes para una gran película de James Bond, o para una extraordinaria temporada de la Fórmula Uno.

El 2007 será recordado como uno de los años con más emociones en la historia de la Fórmula Uno, una campaña que terminó con una lucha por el título entre tres pilotos que se decidió en la última carrera de la temporada, el Gran Premio de Brasil.