Los "diablos rojos" siguen cobrando vidas inocentes. La imprudencia y el desenfreno de algunos transportistas al conducir no termina. Pareciera que a pocos días de finalizar el año la imprudencia cobra cada vez más víctimas, dejando así luto y dolor entre las familias panameñas. Pero, ¿quién frena esta situación o accidentes? Al parecer, a las autoridades les tiemblan las manos para hacerlo, porque mientras para unos transportistas hay sanciones, para otros las cosas siguen siendo sólo un relajo y juegan con las vidas ajenas.

Las tan comunes regatas de la muerte no terminan. Sólo este lunes falleció una persona en la vía principal de Torrijos-Carter, en San Miguelito, cuando supuestamente, según testigos, dos buses hacían regatas.

Para los que residen en el área, el desorden de los transportistas es evidente, y las regatas no paran, por lo que muchos temen por la vidas de sus niños.

MUCHOS NO TIENEN REGLAMENTO

Para el dirigente del sector transporte, Leonel Broce, cada piquera debe tener un reglamento interno que castigue a los conductores irresponsables que hacen regatas y que les gusta el desorden. "Lo que sucede es que muchos de estos conductores hacen rutas en días libres, no hacen piquera y salen a ver quién corre más", dijo. Broce indicó que sólo dos piqueras, la de Pedregal, a la cual pertenece, y la de la 24 de Diciembre tienen este reglamento interno registrado en la ATTT, las demás no tienen.

TRANSITO APLICARá LEY 34

Las autoridades de la entidad del Tránsito y Transporte Terrestre dicen que las cosas cambiarán, porque la ley 34 establece que todo conductor que cometa un acto ilícito en la calle y atente contra la vida de un peatón se le quitará la licencia, de reincidir en los actos se le quitará el Certificado de Operación al dueño del bus. Serán más enérgicos a la hora de poner sanciones bajo el amparo de la ley.

Las autoridades darán a conocer nuevas medidas que se implementarán para contrarrestar el descontrol que tienen los diablos rojos.