Aparentemente, las autoridades están logrando parte de su cometido. En un afán por responder a las múltiples denuncias llegadas a la sala de redacción de este diario, por la venta indiscriminada de bombitas a menores de edad, decidimos recorrer algunas tiendas, kioscos y minisúper del área de San Miguelito, Río Abajo y El Dorado para comprobarlo y darlo a conocer a los lectores.
En ninguno de los más de ocho lugares, que muy discretamente visitamos, vendían bombitas, pues los vendedores decían que no tenían y eso que nuestro "gancho" fue un menor de edad, que muy inocentemente y con el permiso de sus padres, accedió a colaborar.
Pasaban las horas y por más que intentamos, nadie vendió la mercancía, pero sin saber que éramos periodistas un vendedor mencionó que quienes compran y, en cantidad, son los adultos; por ello las revenden en sus casas, lo que en más de una ocasión también se ha denunciado en este medio.
Algo que corroboró esta información fue una denuncia que, por casualidad, escuchamos en una emisora de la localidad, que reiteraba lo de la venta en residencias particulares.
Los sectores de Mañanitas, Samaria Sector 1, Vista Hermosa, entre otros, han sido denunciados como lugares donde adultos venden este tipo de explosivos, más aún, en horas de la noche, cuando escasea la vigilancia policial.
Aunado a la negativa de los "chinitos" de los locales comerciales a vender bombitas, la vigilancia policial se ha redoblado, lo que quizás sea el motivo por el cual los vendedores se han negado a vender cuando, por lo general, las personas saben que sí lo hacen.
Las autoridades siguen alertando a la ciudadanía para que preste mayor atención a este serio problema, recordando a los padres de familia que deben evitar que su hijo manipule algún tipo de explosivo, ya que el Ministerio de Desarrollo Social tomará cartas en el asunto.
El Artículo 3º del Decreto 753 que regula el expendio de artefactos pirotécnicos o explosivos, expresa que se multará a cualquier persona jurídica o natural que venda artículos pirotécnicos a menores de edad o personas en estado de embriaguez; además de decomisarle sus productos, se les impondrá el máximo de la multa establecida en el Artículo Undécimo del decreto.
¡ALERTA!
Con sólo 0.25 centésimos, un niño puede comprar varias bombitas que pueden hasta cercenarle una mano.
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