Piden un cuadro de fútbol bonito. Eran más de 200 niños los que el pasado fin de semana jugaban en el cuadro que está en la comunidad de Rana de Oro. Unas piedras sostenían una vieja malla que hacía de portería; a pesar de lo rudimentaria que estaba la cancha, la diversión era lo más importante. El suelo no era grama, sino gravilla, que con mucho esfuerzo consiguieron los moradores para mejorar la condición del campo deportivo.

Fidel Álvarez, quien organiza ligas en la comunidad, explicó que temen, porque existe un rumor de que el terreno en donde está el cuadro lo quieren vender. "Aquí vienen más de 500 personas, entre niños y adultos, a hacer todo tipo de actividad física", expresó.

Ellos, desde hace meses, han solicitado ayuda a las autoridades locales, pero no reciben respuesta, por lo que pretenden hacer protestas pacíficas.

Mientras, los niños dijeron que como este es el lugar en donde más se divierten, deberían hacer la cancha sintética como ha ocurrido en otras comunidades.

Al final, todos los equipos presentes se preparaban para inscribirse en las ligas de verano.