La señora Nilka compró dos pasajes en Air Madrid para ella y su esposo. Ambos visitarían a su hija en Madrid, que dará a luz a mediados de enero; pero con el cierre de la empresa, quedaron en el aire al igual que 200 personas más en Panamá. Ahora la señora Nilka tuvo que comprar otro boleto en otra aerolínea, pero su esposo no podrá viajar.
Ella es uno de los pasajeros panameños afectados por la quiebra de Air Madrid, quienes se reunieron ayer con el asesor legal para Asuntos Internacionales de la Dirección General de la Autoridad de Aeronáutica Civil (AAC), Ricardo García De Paredes.
Durante el encuentro, los afectados manifestaron su preocupación y el impacto económico que ha provocado el incumplimiento de la empresa aérea.
En un comunicado de la AAC, se informó que se están tomando medidas a favor de los pasajeros, apegados a la ley y cumpliendo con el debido proceso.
Aunque los pasajeros perjudicados no recibieron una respuesta, tienen la esperanza de que en la próxima reunión, que será el 4 de enero de 2007 y en donde participarán los representantes de Air Madrid en Panamá y funcionarios de la AAC, se les dé una solución.
Los afectados continuarán realizando protestas pacíficas, hasta que se les solucione su problema.
FUERTES MEDIDAS
En algunos países latinoamericanos, como Perú, congelaron las cuentas bancarias de la empresa.
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