
La cancha no es limpiada.
Foto: ROBERTO BARRIOS
La cancha no es limpiada.
Foto: ROBERTO BARRIOS
La cancha no es limpiada.
Foto: ROBERTO BARRIOS
“Los jóvenes también tienen derecho a tener áreas recreativas para su entretenimiento”.
Cecilio Atencio
“Hay que mantener las canchas limpias y así ayudar al deporte en San Miguelito”.
Héctor Pitty
La cancha no es limpiada.
Foto: ROBERTO BARRIOS
“Los jóvenes también tienen derecho a tener áreas recreativas para su entretenimiento”.
Cecilio Atencio
“Hay que mantener las canchas limpias y así ayudar al deporte en San Miguelito”.
Héctor Pitty
La cancha no es limpiada.
Foto: ROBERTO BARRIOS
“Los jóvenes también tienen derecho a tener áreas recreativas para su entretenimiento”.
Cecilio Atencio
“Hay que mantener las canchas limpias y así ayudar al deporte en San Miguelito”.
Héctor Pitty
La cancha no es limpiada.
Foto: ROBERTO BARRIOS
“Los jóvenes también tienen derecho a tener áreas recreativas para su entretenimiento”.
Cecilio Atencio
“Hay que mantener las canchas limpias y así ayudar al deporte en San Miguelito”.
Héctor Pitty
La cancha no es limpiada.
Foto: ROBERTO BARRIOS
“Los jóvenes también tienen derecho a tener áreas recreativas para su entretenimiento”.
Cecilio Atencio
“Hay que mantener las canchas limpias y así ayudar al deporte en San Miguelito”.
Héctor Pitty
Una cancha que fue improvisada por jóvenes de Mano de Piedra y utilizada y limpiada por muchos años por los residentes del lugar, se ha convertido en un vertedero de basura.
Y es que, desde hace un año, estos jóvenes reclaman la limpieza de este pequeño cuadro de fútbol que funcionaba como entretenimiento para más de 20 jóvenes que se reunían todas las tardes a realizar deportes.
Antonio Vargas, tiene 17 años y lo único que desea es que la cancha sea limpiada para que tanto él como sus amigos puedan volver a reunirse para jugar este deporte tan gustado por todos los jóvenes y niños de la comunidad.
Algunos residentes dijeron que el lote es propiedad de una familia asiática, pero que ellos nunca han llegado al lugar siquiera a limpiarlo.
Sin embargo, la misma comunidad decidió limpiarla y convertirla en un cuadro de fútbol para que los jóvenes practiquen deportes y de esta forma alejarlos de la violencia y que no se conviertan en personas del mal vivir.