No vayan a creer que la gente porque es rica no tiene problemas o contratiempos a la hora de ir al hospital o de dar a luz.
Pues para que sepan, Julia Roberts la pasó muy mal para llegar al hospital cuando tenía ciertas molestias del embarazo.
El carro de Julia se descompuso, por lo que a su esposo no le quedó más remedio que llamar a un taxi para poder llegar al hospital. Estos cuentos se saben ahora que Julia ya está en casa con sus gemelos.
|