Estoy muy triste por todo lo que me está sucediendo.
Soy una mujer casada que tiene tres hijos, y todos en la universidad.
Al del medio siempre le vi inclinaciones hacia las artes, pero yo no veía nada de malo en eso.
Sus hermanos, cuando estaba pequeño, le daban muchos golpes, porque se la pasaba todo el día dibujando, y yo me ponía de parte de él y el papá ni opinaba para un lado ni para el otro.
Mi hijo ya está en la universidad y estudia diseño gráfico y en días pasados me hizo una confesión, que me dejó fría, pues es "gay".
Yo no le dije nada porque no sabía cómo asimilarlo. El padre, aunque usted no lo crea, lo tomó mejor, porque me confesó que desde chiquito lo veía muy afeminado y que por qué le daba tanto color a eso, ni que fuera el primer "ñaño" en la familia. Lo único que le pidió es que se sepa comportar, porque si no, no lo iban a respetar en ningún trabajo. No sé cómo abordar eso, porque yo asisto a la Iglesia y me da miedo que nos señalen con el dedo. Cora
ESTIMADA CORA
Me imagino que debe ser un poco difícil para ti, porque los padres depositan en los hijos sueños, pero algo debes tener claro: ellos no son una continuación de nosotros, nacen de nuestro ser, pero tienen sus propias ideas, decisiones y gustos.
Si quieres ser feliz en la vida, debes aceptar a los demás tal como son, entre ellos a tus hijos.
Me cuentas que ha sido un joven ejemplar, buen estudiante y por eso nunca te ha dado problemas, entonces debes aprender a aceptarlo, porque el amor de madre no debe tener condiciones.
Sobre qué piensen los demás, no dejes que eso te traume, pues no existe la familia perfecta y de quien te tienes que poner de parte es de tu hijo.
Por ahora, dale un abrazo y dile cuánto lo quieres y de paso no lo trates diferente, pues él sigue siendo el mismo niño que tuviste en tu vientre por nueve meses.
