Ayer terminó el III Festival Internacional de Jazz de Panamá, y la verdad que en las tres jornadas seguidas, el buen arte mundial fue la estrella principal.
En su segunda fecha, denominada "Noche de guitarra, piano y jazz panameño", el buen sonido hizo erizar a cientos de personas que asistieron al Teatro Anayansi, y entre piezas y exponentes del jazz mundial estuvieron de pie para hacer reverencia a los prestigiosos artistas.
Así sucedió cuando se le hizo el tributo a Mauricio Smith, a cargo de Luis Carlos Pérez, Juan Carlos "Wichy" López, Germán "Chispa" Lawson, Marcus Gilkes y Omar Díaz, momento inolvidable del evento, ya que ejecutaron muy bien sus piezas.
De igual manera, el talento internacional no pudo faltar, una de las raíces africanas que brilló en tarima fue Randy Weston, en compañía de Alex Blake y Neil Clarke.
Además, estuvo el guitarrista Kurt Rosenwinkel y su grupo, con Mark Turner y Joseph Martin, quienes demostraron que el jazz es un género digno de admirar. ¡No hay queja!
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