La nota es que las tardes de cantaderas ya no serán las mismas ¿cómo así? Sí, queridos lectores, es que la tecnología llegó a la décima cantada y el responsable es nada más y nada menos que el mismo Broce, quien no para de buscar novedades en la música típica.

Ahora él toca con la primera mejorana electroacústica, cuya modificación consiste en un aparato electrónico que regula los tonos, lo que le permite al guitarrista ajustarse cómodamente a las voces de los cantadores. Según explicó, el mayor beneficiado es el trovador, pues con esta innovación el guitarrista, sobre la marcha de la cantadera, puede subir y bajar los tonos de acuerdo con la voz del cantador. Con esto, logra que se destaque el cantador y no el aparato, que ofrece un acompañamiento más acoplado.

La modificación, a juicio de Broce, fue hecha en Puerto Rico por colegas suyos, que al conocer la mejorana, muy parecida al cuatro puertorriqueño, le sugirieron algunos aportes para que la mejorana panameña tuviera más brillo en su sonido.