Lo cierto es que no iban por la mercancía seca que vendían, sino por el efectivo y artículos de valor.

Mateo Hernández Mosquera y Álvaro Luis Chaverra Perea, al parecer planearon la acción que los pondría en "grandes momentos", pero tras las rejas.

La vista rutinaria a los comercios de Juan Carlos Jiménez e Ideliz Anay Mosquera, marchaba bien, hasta que, como una mala hora en su destino, se les atravesaron Mateo y Álvaro con pistola y cuchillo en mano.

El escenario traumático fue cerca de la bodega Castillo, ubicada en El Valle de Urracá. Aunque pudieron completar el robo de dos dólares y un celular, las autoridades policiales de Santa Marta los obligaron a regresar lo robado.