Williams tiene el deseo de encontrarse con su padre, ya que además de su interés por verlo, existe una herencia de B/.80, 000.00 que les dejó su abuelo en Chiriquí, en la que también tiene participación.

El joven quiere que esto se haga efectivo, ya que actualmente está casado y no tiene empleo, porque simplemente es un voluntario del Sistema Nacional de Protección Civil (SINAPROC).

Hasta donde tiene conocimiento, su padre labora en una importante empresa del país, por lo que le pide a cualquier persona que conozca de su paradero que lo llamen al teléfono 6402-5658.

Aunque su padre tomó otro rumbo cuando estaban muy chicos, no le guardan rencor y solo quieren volver a verlo, porque no se acuerdan ni siquiera de cómo era.