María mencionó que hay clientes que piden la langosta con vida.
Eric Montenegro
| P. Oeste, DIAaDIA
Durante la estación seca, en la vía Interamericana, en el distrito de San Carlos, se aprecian casetas improvisadas, en la que los conductores pueden adquirir frutas hasta langostas capturadas en alguna playa del sector.
María de Prado heredó de su padre la venta de langostas, además del de pescado seco. Este negocio, asegura, es bastante próspero, gracias a la clientela con que cuenta, entre ellos, dueños de restaurantes de la capital y los residentes de San Carlos.
La libra de langosta la vende a B/.6.00 y la mayoría se consigue en Playa Ensenada.
Diariamente compra entre 40 y 50 libras de langostas a los pescadores.
La venta del producto es rápida y más durante la Semana Santa, cuando aumenta el consumo de mariscos; por lo que no es raro vender entre 20 y 30 libras en un medio día.
El horario de trabajo de María es de 7:00 de la mañana hasta las 5:00 de la tarde todos los días.