Con cubo y trapeador en mano, los residentes de Las Tablas también limpiaban

sus casas, pues de igual manera se vieron afectados.

La limpieza del Parque Porras, no se quedó atrás, ya que más de 20 personas le dedicaron especial atención al mismo.

Mientras esto ocurría, los buhoneros, se dedicaron a retirar sus pertenencias, después de un largo trabajo.

Hector Solís dijo que este año fue muy bueno, porque la gente compró bastante, por lo que valió la pena el sacrificio.