Un mesero contratado recientemente para servir canapés y bebidas en una fiesta en la casa de Tom Cruise y Katie Holmes, relató que necesitó firmar un acuerdo de confidencialidad de 20 páginas para poder lograr el empleo.

"A pesar de hacernos firmar el acuerdo, todo no pasó de una fiesta normal. No había nada de especial, ningún clón de Suri y ningún extraterrestre", contó el hombre que se reservó el nombre para E! Online.

Además del acuerdo, el mesero tuvo su pasado investigado por una firma especializada antes de lograr el trabajo.

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