Murió en los brazos de su hijo. Liriola Panezo, de 43 años, cocinaba la cena en su casa de madera, junto a su hijo mayor de 23 años, cuando fue arrastrada por el auto de Guillermo Antonio Marín, de 58 años, que chocó contra la humilde vivienda en el sector de Pancho Alemán, San Miguelito.
Anel Asprilla, hijo mayor de Liriola, quedó atrapado en medio de las tablas y el zinc y fue por la ayuda de unos vecinos que logró salir, y en medio de sus golpes, salió en busca de su madre quien estaba tirada en unas matas de tallo ubicadas en el patio de atrás.
Anel Asprilla, esposo de la mujer, expresó que su hijo tomó a su madre en los brazos para llevarla al Centro de Salud de San Isidro. "Mi hijo me dijo que, cuando él la llevaba en los brazos, ella lo miró, se le salieron las lágrimas y murió".
Una de las metas que tenía Liriola era construir su casa de bloques antes de que llegara el invierno, por eso, desde el pasado 28 de diciembre, ambos esposos empezaron a construir la casa. Ella lo ayudaba a batir la mezcla.
CONDUCTOR
El hombre que se introdujo en la vivienda con su auto es un subteniente jubilado de la Policía.
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