Aún hace falta. La Siesta de Tocumen es una de las comunidades en Panamá que aún carece de agua potable continua, donde sus moradores tienen que cargar agua en tanques para poder satisfacer sus necesidades, esto a partir de la crisis surgida en diciembre de año pasado cuando ocurrieron las inundaciones en el área este del país.
"Esto puede mejorar", según el ingeniero Erick Rodríguez de la Autoridad Nacional de Ambiente (ANAM), quien en medio de la conmemoración del Día Mundial de Agua ayer, explicó que la crisis actual del agua se debe a un fenómeno natural que es muy común en las zonas tropicales y que se dejó ver con la inundaciones en diferentes puntos del país el año pasado.
El fenómeno ha traído desastres, pero tiene sus beneficios, pues ayuda a la reforestación natural de ambiente al pasar los años.
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