Atento y muy positivo. El señor Edgar Quiroz, a sus 35 años, no se deja vencer por la vida.
En su barriada lo consideran como un ejemplo de superación, pues es una persona que con tal de llevar el pan a su hogar es capaz de trabajar en cualquier cosa, siempre y cuando sea un trabajo honrado.
Quiroz es uno de los vendedores más reconocidos en La Siesta de Tocumen por sus técnicas de venta, pues convence a cualquiera de comprarle los sabrosos chorizos asados que vende frente al cuadro de fútbol de este mismo sector.
Una de las técnicas que usa Edgar para que sus clientes se mantengan comprando estos chorizos es la salsa barbacoa, que prepara con un ingrediente secreto especial que a muchos los hace repetir la porción.
TRABAJA SIN PARAR
Por lo general, Quiroz no tiene día libre, pues de lunes a sábado vende periódicos en San Miguelito y los domingos se dedica a vender los tan cotizados chorizos asados. Edgar tiene cuatro hijos, su principal pilar para levantarse día tras día.
Edgar se levanta temprano todos los sábados para preparar, picar y tener todo listo para asar y vender. Él comienza la venta a partir de las 9:00 a.m. y hay veces que le ha tocado extender su horario hasta más de las 6:00 p.m., esto, porque siempre llegan clientes a esa hora.
LO CONSIDERAN UN AMIGO
Los clientes de Edgar lo consideran más que un vendedor, porque su gentileza al trabajar es agradable, tan así es que siempre tiene un tema de conversación con el cual se gana la amistad de cualquiera desde un principio.
RICOS
Edgar tiene una sazón secreta para preparar los chorizos que tanto gustan.
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