Hola Moza, te escribo primero para felicitarte por los buenos consejos que le das a la gente en tu columna y, segundo, para contarte el problema en el que estoy metida. Te cuento mi problema: lo que sucede es que empecé a salir con un hombre mayor que yo y pensé que nuestra relación sería sólo atracción y gusto, pero me equivoqué, a tal punto que ese hombre ha decidido divorciarse de su esposa y yo no estoy preparada para eso. No debería decirte esto, pero yo no quiero casarme, sólo tengo 20 años, y ese hombre 35. Jamás quise destruir su hogar, pero ya sabes cómo son las cosas cuando existe pasión entre dos personas. Ahora me siento culpable, porque creo que él está perdidamente enamorado de mí y yo no. Es difícil, ¿sabes?, y me siento muy mal, aunque no me creas. Él tiene un niño y la esposa es una mujer preparada, muy guapa, porque un día la vi, y ahora que analizo la situación me parece que me equivoqué por tratar de encontrarle un poco de diversión a mi vida. Acabo de conocer a un chico de mi misma edad y con él me siento diferente, ya que hacemos cosas de jóvenes y no tengo que esconderme ni preocuparme porque todos se me queden mirando. Dame un consejo. Chica mala.
NO JUEGUES CON SUS SENTIMIENTOS
Me parece que estás involucrada en una situación muy difícil, porque si dejas a ese hombre en estos momentos que él ha dejado todo por ti, su reacción puede ser mala y las cosas se te pueden salir de las manos. ¿Te imaginas que ese hombre te haga un daño? No lo has pensado, pero un hombre enamorado es capaz de todo. Creo que lo mejor es que hables con él y le expliques que tú eres muy joven para casarte, y por tu edad no estás preparada para llevar una vida de pareja. Explícale que tomar la decisión de divorciarse tal vez no es la mejor y que tiene que analizar las cosas por su futuro y el de su hijo. Si no lo amas y no pretendes formalizar una relación con ese hombre, no lo engañes más, porque eso sí sería jugar con fuego. No te vuelvas a meter en una relación que no puedes sobrellevar y no juegues con los demás. ¡Suerte!
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